Es común en un proceso de diseño aferrarse al primer esquema que funciona y cumple con los requerimientos funcionales y de programa de necesidades.
Los diseñadores también tienen sus recursos o estilos perfeccionados en su trayectoria que los lleva a seguir una línea de diseño al cual se aferran. En cada bosquejo o plano hay invertidas muchas horas hombre, visualizaciones mentales, entusiasmo y sabiduría, por eso nos "enamoramos" de cada esquema.
Si la asesoría se brinda para un lugar ya habitado, el reto puede ser mayor porque estamos habituados a su aspecto, al punto que ni siquiera notamos su deterioro. Aunque una consulta de Feng Shui en su hogar u oficina, no tiene que ver con lo netamente decorativo, finalmente se revierte en sugerir retapizar el sofá, replantear la distribución de escritorios o cambiar el color de una pared.
En un proyecto tal vez hablaremos de orientaciones magnéticas que sugerirán incluso darle un ángulo específico al emplazamiento de la edificación, por donde abrir vanos para que por las "bocas" entre una mejor calidad de energía, que fachadas "cerrar", donde ubicar la gerencia de una empresa o que material o color sugerir para ese muro protagonista en la fachada.
Dependiendo del momento en que llegue la asesoría de Feng Shui, las sugerencias serán más o menos oportunas, más o menos bien recibidas.
Lo que si puedo asegurarles es que siempre, siempre, siempre, una vez movilizado, el resultado es diametralmente mejor!!!
Sin embargo, recuerde, en todo caso, los cambios son cambios.
No vale “adicionar” uno u otro objeto a lo anterior.
Como en una dieta, no vale comerse una manzana diaria y seguir comiendo fritos y azúcares. Hay que cambiar los hábitos e incrementar las verduras y frutas saludables, hacer ejercicio...ah! y mantenerse en la ruta! o volverá a engordar.
Así mismo en el Feng shui es entender el sentido o ruta a seguir e implementar las sugerencias. Esto puede significar en un proyecto, cambiar el esquema, reorganizar zonificación o hasta cambios de hábitos, aprendizajes sobre el desapego y la seguridad de lo conocido.
El Feng Shui es atemporal y brinda el marco para potenciar el Qi.
Cabe anotar, que de todos modos las indicaciones son una guía y le corresponde al diseñador o a la familia, realizarlos o no. Algunos cambios serán más fáciles, otros serán más difíciles… en especial en el campo emocional.
El Feng shui brindará las pautas, usted seguirá los pasos con su propia sabiduría, técnicas y hasta objetos, muy seguramente habrá mucho de que echar mano.
Apoyada en mi profesión de base, la arquitectura, puedo ofrecer un apoyo sustentable en cualquier proyecto macro o decorativo. El reto es encontrar en conjunto la salida creativa a las sugerencias sin que vaya en contra de los procedimientos, normatividad o la dinámica familiar. Esta asesoría debe servir como ordenadora o transformadora del proceso. Con esto reitero que las sugerencias serán más o menos difíciles de asimilar dependiendo de muchos factores... pero siempre, siempre, siempre, una vez movilizado, el resultado es diametralmente mejor!!!