Por definición, lo oculto es todo aquello que no está a la vista, puede ser un tema, objeto o persona que permanece fuera del alcance de nuestros sentidos.
Dado que oculto no es necesariamente sinónimo de oscuro, negativo, nocivo o maligno, el ocultismo o las ciencias ocultas solo deben entenderse como saberes que no están disponibles para todos. Algunos dirían que no están a disposición de los no- iniciados, otros indicarán que se reservan para quienes deseen buscarlos.
La paradoja de las ciencias consideradas ocultas es que se ocultan a si mismas, pero están ante la mirada de todos. Es decir, no está escondido, tapado o guardado, sino a sobre la mesa, cualquiera puede tocarlas, observarlas, hasta diríamos que “jugarlas”, a veces incluso las personas las tienen en sus manos sin saber que están en ellas.
He aquí la paradoja de las ciencias ocultas, no se ven y a la vez están a la vista de todos.
En este sentido el tarot si podría considerarse una ciencia oculta, todos pueden el mazo, se despliega sobre la mesa, sin embargo no revela sus secretos sino hasta tanto alguien se acerque con la disposición de aprender el idioma con el cual se expresa.
Una vez entendido su idioma, solo con el permiso y respeto de quienes están presentes, ciertamente revela mensajes hasta el momento secretos, siempre en un sentido positivo y proactivo para quienes le consultan.
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